Carlos Mora Vanegas
Desde luego, Grecia tiene islas bellas, que invitan a ser visitadas, disfrutarlas, además por lo que encierran en su historia, leyendas. Hace unos cinco años atrás, me tocó ir a Creta, que como muy bien la describe Wikipedia: Creta (griego Κρήτη es la isla más grande de Grecia y la quinta en tamaño del mar Mediterráneo. El archipiélago cretense conforma una de las 13 periferas y una de las 7 administraciones descentralizadas de Grecia. Hasta principios del siglo XX también se la conoció con el nombre de Candía, topónimo que deriva del latín candidus («blanco») y que le aplicaron los marinos y comerciantes italianos del Medievo.
Posee una superficie de 8.300 kilómetros cuadrados, una costa de 1.040 kilómetros, y una población de unos 600.000 habitantes.
Durante la II Guerra Mundial, la isla fue escenario de la Batalla de Creta.
Creta es una de las regiones en que se divide Grecia, su capital es la ciudad de Heraklion y se encuentra dividida administrativamente en cuatro unidades periféricas: La Canea, Rétino, Heraclión y Lasithi. Existen bases navales estadounidenses en Heraklión y en Suda Bay.
Creta es una isla que presenta costas cercanas a los 2.500 metros en el Monte Ida (2.460 metros) y en Levká Óri (2.452 m) y una altitud media de más de 200 metros en gran parte de la superficie de la isla. Su relieve está configurado en gran medida por la actividad sísmica, responsable de sus 1.040 kilómetros de recortadas costas y de sus llanuras fragmentadas.
Su río más importante es el Mesara. Entre sus golfos sobresalen el de Mira bello (Mirampéllou), el Chanión (Khanión), y las bahías de Mesara y de Almyroú. Sus cabos más importantes son el Spátha (Ákra Spánta), el Líthinon (Ákra Lithino), el Stavros y el Sideros (Ákra Sideros
Nos aporta además Wikipedia, que Creta llegó a su máximo esplendor, siendo los siglos XVI y XV a. C., los de mayor auge. Durante ellos Creta estableció una talasocracia que se extendía hasta la Grecia peninsular, el mar Egeo, las costas de Asia Menor y zonas adyacentes como Sicilia. Durante esta época los contactos con Egipto, existentes desde anteriormente, fueron muy importantes.
Sin embargo, hacia finales del siglo XV a. C., la isla sufrió la invasión de los aqueos, quienes habían desarrollado una civilización en la Grecia continental, fundamentalmente en el Peloponeso, no exenta de fuertes influencias cretenses. Con la expansión de los invasores, los cretenses abandonaron los palacios. Las civilizaciones micénicas continentales, barajándose también la posibilidad de que una colonización de emigrados cretenses en las costas del sur de Canaán fuese el origen de los filisteos (peleset), que aparecen en la Biblia y de cuyo nombre procede el topónimo Palestina. Estos filisteos fundaron varias ciudades en la costa meridional cananea: Gaza, Asdod, Ecrón, Ascalón y Gat.
La decadencia de Creta, iniciada con la hegemonía aquea, se vio acentuada en el siglo XI a. C., con la invasión de los dorios, portadores del hierro. La isla pasó a ser una parte más del mundo griego, sin originalidad y dividida en ciudades rivales. Incluso en época clásica (siglo V a. C.) conservaba cierto arcaísmo, como lo demuestran las Leyes de Gortina, una de las ciudades que datan de tiempos minoicos. La decadencia de la isla fue tal a partir del 500 a. C. que cayó en el olvido y no tomó parte ni en las Guerras Médicas, ni en la del Peloponeso
Conquistada por Alejandro Magno, a su muerte, Creta gozó de cierta independencia sobre otros reinos helenísticos cercanos, pero tras la decadencia helenística la isla quedó en manos de piratas de origen siciliano, lo que provocó que los romanos se apoderasen de la isla en el 67 a. C. en una expedición comandada por Cecilio Metelo y la agregasen como provincia romana. La división del Imperio romano en el 395 devolvió a la isla un cierto papel importante dado su enclave como llave del mar Egeo, quedando en manos del Imperio romano de Oriente o Imperio bizantino.
rincondelvago.com nos aporta por su parte, que Creta es una isla que forma un límite al sur del Mar Egeo, y al sudeste de Grecia. Creta mide 250 kilómetros de largo, entre once y cincuenta y seis kilómetros de ancho, y 8.164 kilómetros cuadrados en área. Es la quinta isla más grande en el Mar Mediterráneo (después de Sicilia, Sardinia, Chipre, y Corsica). Está en la cima de una sierra submarina que algunos piensan haber conformado en tiempos antiguos un puente terrestre entre la península griega de Peloponeso y el sur de Turquía. En tiempos antiguos Creta ocupaba el paso marítimo principal entre Grecia y África, y entre Asia Menor y África. Los Filisteos quizás emigraron a Palestina de Grecia, viviendo en Creta por un tiempo en el pasado antiguo. Creta tiene ubicación central, pero muy poco se sabe de su historia antes del período griego. No fue sino hasta las expediciones arqueológicas del Señor Arthur Evans a fines del Siglo 19 que los hechos de la historia cretense antigua llegaron a conocerse. Evans era un millonario sin empleo en Inglaterra, así que tomó el cargo de curador del Museo Asmoleano de la Universidad de Oxford en Oxford, Inglaterra. Era un ávido aficionado de la arqueología, pero estaba por alcanzar un renombre que lo puso entre los más profesionales. Evans también era un numismático, y oyó contar de algunos sellos muy interesantes que algunos egipcios antiguos habían supuestamente dejado en la isla de Creta. Tomando una vacación prolongada del museo, navegó su yate personal a Creta en 1894. Llegó al puerto de Nosos en ese año y empezó una excavación arqueológica en un sitio cercano llamado Kefala. En el primer día de excavar, destapó la cumbre de un palacio de la edad de bronce. Supo que había hallado algo, pero siendo que la propiedad no le pertenecía; cubrió el hoyo y empezó negociaciones con el gobierno griego de Creta para comprar el sitio. El lugar que Evans compró era el sitio del antiguo Nosos; y el palacio que había hallado era el del Rey Minos, quien hasta ese tiempo, se consideraba como una leyenda. Evans llamó la civilización de Rey Minos la civilización Minoa. Esta floreció de tiempos tempranos hasta aproximadamente 1400 AC, y su descubrimiento ha sido inestimable para el estudio de historia y lenguas griegas y europeas, sobre todo las del área del Mediterráneo oriental. La cultura de Minos se distingue por la originalidad y alto desarrollo de su arte y arquitectura. De hecho, esta cultura se considera precursor de la civilización Micena de Grecia antigua. Se hallaron muchos ejemplos de escritura pictográfica en el sitio del palacio; y se identificaron dos formas básicas, denominadas Minoana Lineal A y B. La obra de decifrarlas empezó en los años 1.930, pero el secreto de la escritura Lineal B no se resolvió hasta 1.953, cuando dos hombres llamado Ventris y Chadwick determinaron que la Lineal B es una forma arcaica del griego temprano
Nos agrega además la fuente, que el Señor Arthur Evans fue reconocido con muchos honores: fue eligido Compañero de la Sociedad Real de Arqueólogos; fue nombrado caballero en 1911; fue nombrado presidente de la Sociedad de Anticuarios entre 1.914 y 1.919. Murió en Oxford en 1.941. La civilización de Minos fue destruida en aproximadamente 1.400 A.C. con la erupción del volcán Santorini en la isla de Tera, aproximadamente 110 kilómetros al norte de Creta. Se piensa que primero una ola gigantesca golpeó la isla, la cual destruyó ciudades y poblaciones costeras, y luego cayó ceniza volcánica, que enterró la isla entera. Arthur Evans excavó los edificios 3.300 años más tarde. Por supuesto, la isla empezó a ser poblada de nuevo inmediatamente cuando gente emigró del continente. En aproximadamente 600 A.C., griegos de Doria vinieron con fuerza y conquistaron la isla. Sus primos eran los griegos de Esparta de Peloponeso y los griegos filisteos de Palestina. Griegos de Esparta se establecieron en el lado occidental de la isla en ciudades como Lito. Todos los griegos en la isla eran guerreros, luchadores feroces, con mucho orgullo de su independencia y cualidades bélicas. Gente de las islas tienden a ser independientes, y este rasgo fue aumentado por su herencia. Habían Judíos de Creta en Jerusalén en el Día de Pentecostés (Hechos 2:11) y Pablo bajo por lo menos una vez en Creta, en su viaje a Roma (Hechos 27:7). Las citas siguientes son de las obras de Políbio, uno de los historiadores griegos más famosos y prolíficos de la época romana. Las citas se toman de sus Historias. Cuando se va a reta se debe conocer sus yacimientos arqueológicos, así como el palacio de Gnosos, sus museos y el Monasterio de Toplou, la universidad de Creta , la catedral de la Canea
No hay comentarios:
Publicar un comentario