http://www.youtube.com/watch?v=5KSbyM1GRO8

martes, 19 de abril de 2011

LOS NAZIS Y LA TIERRA HUECA



Carlos Mora Vanegas
Es sabido, que desde hace muchos años se ha venido hablando sobre la  tierra hueca y al respecto se han dado muchas explicaciones, especulaciones, opiniones  que motivan adentrarse  que hay de realidad en todo ello.
En lo personal muchos años atrás me llamó la atención sobre lo que sobre este tema se ha escrito y desde luego me dio mucho que pensar lo que nos legara en su obra Julio Verne  en Viaje al Centro de la Tierra.  
Se sabe, que  fue descubierto un mundo subterráneo de superhombres debajo del polo norte, se dice, que es el  mayor descubrimiento geográfico de la historia. Nos aporta al respecto Raymond Bernard , que debemos tener presente, lo que dice el explorador ruso Dumbrova, que :  “El memorable descubrimiento del 12 de diciembre de la tierra, hasta el momento desconocida, más allá del Polo Sur, realizado por el Capitán Sir George Hubert Wilkins, conllevando a que la ciencia modifique el concepto que ha tenido durante los últimos cuatrocientos años sobre el contorno del sur de la Tierra”.
Desde luego, al referirse a la Tierra hueca, se debe recordar las famosas expediciones del vicealmirante Richard E. Byrd a los polos Norte y Sur.
Sobre ello, nos aporta lo-inexplicable.com.ar, que el vicealmirante Richard E. Byrd de la US Navy fue un distinguido aviador pionero y explorador polar que sobrevoló el Polo Norte el 9 de mayo de 1926 y dirigió numerosas expediciones a la Antártida, incluyendo un vuelo sobre el Polo Sur el 29 de noviembre de 1929. Entre 1946 y 1947, llevó a cabo la operación a gran escala llamada "High Jump" (Salto Alto), durante la cual descubrió y cartografió 1.390.000 km2 de territorio antártico Buenos Aires
Las famosas expediciones de Byrd entraron por vez primera en la controversia de la Tierra hueca cuando varios artículos y libros -especialmente Worlds beyond the Poles (Mundos más allá de los Polos), de Amadeo Giannini- pretendieron que Byrd había en realidad volado no por encima del Polo, sino hacia dentro de los grandes agujeros que llevan al interior de la Tierra. Ray Palmer, basándose principalmente en el libro de Giannini, introdujo esta teoría en el número de diciembre de 1959 de su revista y, a raíz de ello, mantuvo una voluminosa correspondencia al respecto.
 Nos agrega además p la fuente señalada, Según Giannini y Palmer, el vicealmirante Byrd anunció en febrero de 1947, antes de un supuesto viaje de 2.750 km. a través del Polo Norte: "Me gustaría ver la tierra más allá del Polo. Esa área más allá del Polo es el centro del Gran Enigma." Giannini y Palmer decían también que, durante su supuesto vuelo sobre el Polo Norte en 1947, el vicealmirante Byrd comunicó por radio que veía debajo de él, no nieve, sino áreas de tierra con montañas, bosques, vegetación, lagos y ríos y, entre la maleza, un extraño animal que parecía un mamut. También, siempre según Giannini y Palmer, en enero de 1956, después de dirigir otra expedición a la Antártida, el vicealmirante Byrd había manifestado que su expedición había explorado 3.700 km. más allá del Polo Sur y, además, justo antes de su muerte, Byrd había dicho de la tierra más allá del Polo que era "un continente encantado en el cielo, tierra de misterio permanente". Esa tierra, según otras teorías, era la legendaria Ciudad del Arco Iris, cuna de una fabulosa civilización perdida.
Para Giannini y Palmer, los comentarios atribuidos al vicealmirante Byrd no hacían más que confirmar lo que ellos habían sospechado siempre: que la Tierra tiene una forma "extraña" en los Polos, algo parecido a un "donut", con una depresión que, o bien se hunde muchos kilómetros en las entrañas de la Tierra, o forma un agujero gigante que pasa a través del eje de la Tierra, de un polo a otro.
Dado que, por razones geográficas, es imposible volar 2.750 km. Más allá del Polo Norte o 3.700 km. Más allá del Polo Sur sin ver agua, es lógico pensar que el vicealmirante Byrd debe haber volado hacia dentro de las enormes cavidades convexas de los polos, dentro del Gran Enigma del interior de la Tierra y que, si hubiera seguido adelante, habría llegado a la base secreta de los OVNIS que pertenecen a la super-raza oculta, quizás la legendaria Ciudad del Arco Iris que Byrd habría visto reflejada en el cielo.
La posibilidad de que la Tierra sea hueca, de que se pueda entrar en ella a través de los polos Norte y Sur, y de que civilizaciones secretas florezcan en su interior, ha espoleado las imaginaciones desde tiempo inmemorial. Así, el héroe babilonio Gilgamesh visitó a su antepasado Utnapishtim en las entrañas de la Tierra; en la mitología griega, Orfeo trata de rescatar a Eurídice del infierno subterráneo; se decía que los faraones de Egipto se comunicaban con el mundo inferior, al cual accedían a través de túneles secretos ocultos en las pirámides; y los budistas creían (y creen todavía) que millones de personas viven en Agharta, un paraíso subterráneo gobernado por el rey del mundo.
Por supuesto, todo esto ha dado paso a que también se llegue a pensar que los nazis conocieron de la tierra hueca y se dice al respecto  que la teoría de la Tierra hueca tuvo gran popularidad y difusión durante el Tercer Reich. Algunos de los principales jerarcas nacionalsocialistas estaban convencidos de que la Tierra estaba hueca y que se podía acceder a ella por enormes aperturas en los polos. Al parecer, Adolf Hitler y Rudolf Hess estaban entre ellos .
 Por otra parte, nos comenta suite101.net, que existe una sociedad en los Estados Unidos llamada The Society for a Complete Earth. (La Sociedad por una Tierra Completa), cuyos miembros aseguraron en 1971 haber tenido acceso a un diario secreto que Byrd redactó durante sus exploraciones, en donde estarían confirmados estos descubrimientos.
Han llegado a afirmar que este gobierno norteamericano mantuvo una pugna callada con los nazis para impedir que éstos tuvieran acceso al mundo intraterrestre.
Lo que nos lleva a otro aspecto alucinante de esta historia. Adolph Hitler nombró como Plenipotenciario de las Ciencias, Física y Matemáticas al ingeniero austriaco Hans Horbiger, uno de los más firmes proponente de la Teoría de la Tierra Hueca, quien sostenía que los humanos no habitamos en una tierra cóncava sino convexa, pues nos hallamos en el interior de una esfera.
Una prueba de esta creencia nazi la aportan los autores franceses Jack Bergier y Louis Pauwels en su libro ya de culto El retorno de los brujos (Le matin de magiciens), quienes describen, cómo en abril de 1942 Heinrich Himmler y Herman Goering dan su aprobación a una expedición a la isla de Rugen, en el Mar Báltico, conformada por los mejores expertos en radares y dirigida por el doctor Heinz Fisher, pionero en el estudio de los rayos infrarrojos.
Los expedicionarios iban provistos de los aparatos de radar más perfeccionados en su momento, y los experimentos que iban a hacer fueron clasificados por el Alto Estado Mayor de la Marina como de suprema importancia para la defensa de Alemania.
http://www.cherada.com/ al respecto escribe que  existe la leyenda… que Hitler y muchos de sus acólitos nazis escaparon Alemania en los días finales de la Segunda Guerra mundial y huyeron a Antártida donde en el Polo Sur habían descubierto una entrada al interior de la Tierra. Según la Sociedad Hueca de Investigación de Tierra en Ontario, Canadá, estos nazis aún ahora viven allí. Después de la guerra, los Aliados descubrieron que más de 2.000 científicos de Alemania e Italia habían desaparecido en el Polo Sur, junto con casi un millón de personas. Esta historia se relaciona con el tema nazi-OVNIS, según la cual se dice que conocían tecnología UFO y la experimentaban en la Antártica.
 En definitiva que hay detrás de todo ello,   es un tema que invita a seguir siendo investigado y probablemente algún día se sabrá la verdad de todo ello con pruebas fehacientes, objetivas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario