Carlos Mora Vanegas
“Las personas con altos niveles de dominio personal no se plantean deliberadamente integrar la razón con la intuición; le sale espontáneamente, es un resultado de su determinación de emplear todos los recursos de su alcance: No pueden permitirse escoger entre razón e intuición, entre cabeza y corazón, del mismo modo que no escogerían nunca caminar sólo con una pierna o ver sólo con un ojo”. Peter Senge
Resumen
Se dice, que los auténticos empresarios místicos viven la vida a partir de una base espiritual. Desafortunadamente en Occidente esto no es muy tomado en serio. No obstante, considero que respaldarse en aquello que es trascendental como es lo espiritual, nos permite transitar en esta dimensión ilusoria con más fortaleza y con más convicción de llevar a cabo la misión que se nos ha legado, del por qué estamos en esta manifestación física.
Hendricks y Ludeman (The Corporate Mystic) nos destacan, que los auténticos empresarios, si hacen negocios lo hacen para enriquecer su corazón y su alma, además de su bolsillo. Desde luego, hacen uso de su intuición, esa que se nos ha legado y nos acompaña hasta el momento de abandonar este plano.
El objetivo de este artículo es analizar la relevancia de utilizar la intuición y ayudarse en todas aquellas acciones que nos toca desenvolvernos, el no descuidarla y sacarle provecho mientras permanezcamos acá.
Por tanto, el gerente puede beneficiarse con ella, como lo señala un empresario: Si dedico veinte minutos al día simplemente a pensar, el día transcurres como una seda. Si estoy tan ocupado que me olvido de mis veinte minutos mágicos, las cosas no acaban de salirme bien. He aprendido a captar cuánto me estoy descentrando; en este momento tengo que irme a mi despacho, cerrar la puerta y mirar un rato por la ventana. Conectarme con la intuición
Consideraciones, generalidades
Todos en algún momento nos hemos identificado con la intuición, con esa fuente invisible que mora en nosotros y que de alguna forma nos ayuda a enfrentar situaciones, a sugerirnos aquellas acciones que debemos hacer, eso no se perderá nunca hasta que desaparecemos físicamente de esta dimensión. Lo importante es, ¿Cómo interpretarla? ¿Como beneficiarnos de ella? ¿ Cómo utilizarla eficientemente?. Lo cierto, que como señala el diccionario y nos lo recuerdan Hendricks y Ludeman, la intuición, es el conocimiento directo de algo sin el uso consciente de la razón. Es lo que puede emplearse para : *Conseguir un nuevo mercado para un producto ya existente. *Realizar una inversión en un momento oportuno. *Detectar dónde están los problemas en un proyecto determinado. *Contratar a alguien..
Se nos recuerda además, que la intuición es un don natural, algo a lo que todos tenemos acceso. Es, además un talento, algo que podemos perfeccionar con la práctica , a propósito, ¿Lo hace usted? ¿ Le presta la atención necesaria?.
Es cierto cuando se nos dice, que la razón principal de la importancia de la intuición es ésta: constituye una clara señal de que estamos conectándonos con nuestro sistema de espiritualidad interna, Sistema que considero muchos descuidan, otros ignoran, no obstante, hay quienes si lo alimentan, en donde esperamos usted sea uno de ellos, es una fuente que no se debe ser descuidada. La intuición es una señal directa de nuestra identidad más profunda que nos indica que estamos operando desde nuestro auténtico centro. Como lo dijo y nos lo recuerdan los autores citados, el obispo de Canterbury: “Cuando rezo, suceden milagros. Cuando no rezo no suceden”. Lo mismo puede decirse de la intuición. Cuando está en marcha, podemos estar seguro de que es porque hemos estado alimentando nuestra conexión con nuestra alma de algún modo. Cuando no funciona, es que ya va siendo hora de dedicar algún tiempo a la meditación, o irse a contemplar una cascada, o encerrarse a solas en el despacho.
Considero que debemos dedicarle algunos minutos a esa comunión de ideas con nuestro Yo Superior, que nos permite adentrarnos con la intuición que está al servicio nuestro y proporcionarnos todas aquellas informaciones que se requieren cuando la duda por ejemplo se manifiesta, no hay que descuidarlo..
Tome muy en cuenta las palabras del prebístero Theodore Hesburgh, anterior presidente de la Universidad de Notre Dame, refiriéndose a los líderes.”No se puede alabar a un desconocido”. La combinación de intuición y lógica proporciona al líder empresarial un puesto unitario de donde poder dirigir. El líder que quiera crear una proyección de futuro lo bastante convincente para motivar a sus socios a mejorar en sus resultados debe basarse en la mente intuitiva.
Justamente, la integridad y la proyección de futuro son las precursoras de un uso pleno de la intuición. Esta funciona mejor cuando estamos en un estado de integridad. Cuando nos salimos de ella, el ruido que generan todas las faltas de integridad tiende a ahogar las sutiles señales de la intuición.
Hendricks y Lundeman agregan, que la intuición también opera mejor cuando sabemos hacia donde nos dirigimos. La proyección de futuro es una gran liberadora de la intuición. Un empresario místico dijo: “La intuición favorece a las mentes tranquilas y abiertas”. La integridad contribuye a tranquilizar la mente, eliminando el ruido causado por la mentira y el incumplimiento de compromisos. La proyección de futuro aclara la mente, dándole una concentración general y una dirección determinada.
Es muy significativo cuando se nos recuerda además, que la intuición no es algo que pueda aprenderse en un libro; hay que practicarla a partir de las experiencias, experimentalmente y de manera frecuente. Ni siquiera la mejor información acerca de nuestra intuición nos hará más intuitivos. Esto se consigue pasando mucho tiempo en los vastos espacios de nuestra mente, cuando nos hemos propuesto realmente utilizar esos potenciales, esa luz que nos alumbra cuando nos hemos decidido encenderla.
Es hora de detenerse y hacer un uso eficaz de la intuición, experimentar la satisfacción de haber abierto las puertas de un reino a menudo misteriosos en beneficio de nuestro propio aprendizaje. El Dr. Jonas Salk, señala al respecto: “La mente intuitiva le dirá a la mente pensante dónde seguir buscando”.
Comentan poor último, Hendricks y Lundeman, que la suerte favorece realmente a las mentes preparadas, así que no se sugiere tirar por la borda la lógica y hacerlo todo por impulsos. Pero lo cierto es que la lógica es sólo una parte de nuestras capacidades mentales; ya que se cuenta con la intuición, entonces ¿ Por qué no aprender a utilizarla?. El gran valor de la intuición se basa en que nos permite encontrar soluciones que no se aprecian a la luz de la lógica. Es un modo de iniciarse en las inmensas riquezas que nos ofrece lo desconocido. Si la lógica es el Sol, la intuición es la Luna. Ambas deben ser apreciadas por un buen líder reflexivo. No la descuide...
Prof. Titular, Área de Postgrado de Faces, UC.
Anotaciones Cátedra Comportamiento organizacional, Aula virtual, Programa de postgrado Especialidad gerencia de la Calidad y productividad, Faces, UC
Ingeniero- Administrador
Exatec
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