Carlos Mora Vanegas
"Si no cambiamos la dirección de nuestros pasos es muy probable que acabemos llegando allí adonde nos dirigimos."Proverbio Chino
Nos agrega además en este análisis el Dr.Abreu, que varias son las causas de la crisis de este liderazgo a saber: En primer lugar, el generacional, pues la mayoría de los llamados líderes fundamentales está sobre los 60 años de edad. La concepción del país es otro factor crítico, pues la dirigencia actual se formó dentro de la concepción del estado petrolero tradicional, siendo su formación política escasa o inexistente, resaltando la inconsistencia y la improvisación. El sistema vertical de organización política es impuesto de arriba hacia abajo y existe un problema de credibilidad de los líderes políticos, sindicales, empresariales, militares, culturales, universitarios, etc., porque la confianza y aprecio hacia ellos que solía haber hace ya mucho tiempo, hoy ha bajado apreciablemente o, en algunos casos, es simplemente inexistente.
Según se dice, de acuerdo a investigaciones del Dr. Abreu, los sectores que están generando más líderes para Venezuela son el militar (50,9 por ciento), el intelectual / universitario / científico (48,4 por ciento), el comunitario / vecinal (47,2 por ciento) y los medios de comunicación social (39,8 por ciento).
¿Cómo repercute esa ausencia en el País?
La crisis de liderazgo que atraviesa Venezuela repercute en todos los sectores del país, desde que no contamos con la orientación de alguien que guíe las acciones que los venezolanos deseamos emprender.
De cualquier forma, hay algo que es muy cierto y es, que el liderazgo en tiempo de crisis, es una tarea muy dura de desarrollar. El venezolano se ha visto afectado en muchas perspectivas de su vida, tanto en la económica como en la social, y lo más grave aún en la psicológica, pues se siente la impotencia de no poder o no tener ningún líder que guié las acciones que se desean ejecutar en pro del crecimiento de la calidad de vida del venezolano.
Definitivamente, urge que se le preste más atención al afloramiento de líderes con nuevos esquemas adaptados a la realidad del presente, que les permita dar paso a nuevas transformaciones, con equipos integrados, cohesivos, programas que estén debidamente evaluados en sus alcance y repercusiones, que no propicien la división, que se garantice la libertad, democracia, todo aquello que ayude a contribuir en pro del desarrollo de un país que lo requiere.
Téngase presente, el comentario por ejemplo de Mariano Crespo en donde expone su punto de vista que no puede ser ignorado, como por ejemplo: La oposición venezolana padece de una ausencia de liderazgo que cada día que pasa se hace mas patético, y es que ocurre un hecho sumamente curioso, sus dirigentes tradicionales corresponden a una generación con demasiados compromisos con un pasado nefasto que ha sido caótico, y en donde el presidente Chávez se aprovecha de esta debilidad para propiciar cambios que le garanticen fortaleza en sus acciones.
Conclusión
No se puede negar en conclusión, que el liderazgo venezolano está en total falta de sintonía con la sociedad debido a su incapacidad de entender las fuerzas sociales que actualmente participan en la vida pública y es hoy ilegítimo El liderazgo actualmente ha dictado con su ejemplo comportamientos no acordes a dejando mucho que decir las acciones que se siguen y normas no acordes a reglas del juego, que deja mucho que decir por todo lo que se está originando. Hay mucha división, contradicciones, dando paso a que surja un escenario muy incierto, que está afectando seriamente el desarrollo del país, propiciándose incertidumbre, inseguridad, huelgas, protestas, paros, que dejan mucho que decir y que afectan seriamente al país. Hay un liderazgo con grandes debilidades y ausencia de una oposición convincente que presente líderes visionarios capaces de actuar de acuerdo a las características que el presente demanda.
Definitivamente, la carencia real de Venezuela es de líderes visionarios y conductores del desarrollo nacional, o sea, dirigentes capaces de mantener estados de excelencia personal, (en sí mismos y en los demás), que tengan e infundan confianza, autocontrol, compromiso y honestidad; personas con habilidades de relación, con capacidades de compresión, motivación y comunicación; habilidades de pensamiento estratégico, o sea, capacidad de definir y alcanzar metas y objetivos específicos en función de un futuro deseado; y habilidades de pensamiento sistémico para identificar y atender problemas, procurando la resolución eficaz de los mismos, así como también contar con la capacidad de crear equipos funcionales que se ocupen de ayudar y trabajar por motivos que vayan más allá de ganar dinero o lograr prestigio.
**Notas sobre liderazgo venezolano, Cátedra de Tópicos gerenciales modernos, programa especialidad gerencia de la calidad y productividad, Área de Postgrado de Faces, universidad de Carabobo, Aula Virtual.
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